Bodega familiar, las raíces del Casar de Burbia y de la familia también, están vinculadas estrechamente con el territorio del Bierzo. Todo esto se debe a Nemesio Fernández Bruña, primera generación de la bodega y fundador.
No sería hasta 1998, cuando ve la luz la primera de sus cosechas con el sello D.O Bierzo. Desde entonces, Casar de Burbia a lo largo de las cosechas ha ido buscando un aprendizaje y evolución, constante.
En 2020, se toma el relevo generacional por parte de Isidro Fernández, el pequeño de lo hijos del fundador, comenzando como asesor de viña hasta dirigir esta, con la ayuda inestimable de Fermín Uría ingeniero químico y enólogo.