Ciencia, técnica y arte de producir vino…
Entrevista a Mercedes García Rupérez.
Tras casi 10 años trabajando en los vinos de Bodegas Montecillo, Mercedes García, enóloga de bodega centenaria está convencida de que las virtudes del terroir y del viñedo de Rioja Alta, combinadas con una viticultura exigente, precisa y respetuosa, dan como resultado vinos honestos y con personalidad. Y eso es lo que ella ha conseguido: vinos de excelencia y guarda que se inscriben en la autenticidad de la marca y de la región, capaces de trasladar su carácter, tan arraigado en el lugar, a una expresión actual y única.
¿Cuál es la parte más bonita y la más difícil de ser un enólogo?
Sin duda La Vendimia, así, en mayúsculas. Cada año trae consigo un nuevo reto y una ilusión diferente; sin menospreciar las largas horas y la tensión implícita en el trabajo de viña, es sin duda una labor apasionante. Es empezar una de las etapas más lindas, laboriosas y agotadoras dentro del ciclo dentro de una bodega. Una etapa que se inicia con la definición de un programa de vendimia “dinámico”, que se modificará una y mil veces por diversos factores que por naturaleza afectan a nuestra materia prima, desde la madurez avanzada o las lluvias prematuras, hasta las relaciones con viticultores, entre otros.
¿Dónde anida el éxito y la diferenciación del vino de Bodegas Montecillo?
La selección en el viñedo es fundamental, la calidad y excelencia de la materia prima es nuestra obsesión. Trabajamos con viñedos vinculados a la Bodega desde nuestro inicio, con viñas que superan una media de edad de 30 años, cultivados en suelos pobres en secano y recolectados de forma manual. En segundo lugar la barrica y el trabajo de la madera: los más de 40 años que dedicamos al arte de la tonelería nos han instruido en su manejo. El rol de la barrica es importantísima para nuestro vino y el cuidado y esmero de nuestras crianzas es seña de identidad de la bodega. Por ello en Bodegas Montecillo seleccionamos meticulosamente y mimamos cada barrica de roble artesanal en las que nuestros vinos comenzarán el misterioso mundo de la crianza.
En resumen, es la combinación de una elaboración muy cuidada, del respeto a una tradición centenaria y del refuerzo de la mejor tecnología lo que ha llevado a nuestros vinos a perpetuar el mito de nuestra marca.
¿Qué hay que saber para disfrutar de una buena copa de vino?
Es algo que seguro se da solo, no hace falta ser un entendido…un buen vino siempre se disfruta. Considero que cada vino tiene su momento y cada momento tiene su vino.
¿Qué es lo que realmente define un buen vino?
No me gustaría limitar mi respuesta a una definición única, ya que hay vinos para cada consumidor y cada gusto. Lo que sí que es muy importante que el vino esté equilibrado y que no presente defectos.
¿Qué considera más importante variedad o terruño?
La respuesta depende mucho del contexto y del objetivo final de la elaboración de cada vino, ya que la variedad marcará sin duda su perfil (afrutado, floral, mineral, ligero, potente, dulce…) y por tanto al tipo de consumidor al que podrá dirigirse o su “categoría” de comercialización. Por otro lado, el terruño define la identidad del vino, forma parte de su personalidad, hace que cada categoría de vino sea diferente a nivel “genético”.
¿Cuál piensas qué es la zona vinícola que tiene más potencial en España?
Tomando en consideración no sólo el volumen de venta y precio medio, sino también la calidad, la constante exigencia de sus vinos en general y la diversidad que ofrece, sin duda Rioja. Si bien la zona se ha consolidado como un referente de calidad a nivel nacional y continúa conquistando paladares en el extranjero, tiene aún mucho por ofrecer…
¿Qué deberíamos aprender de los vinos extranjeros y que les podemos enseñar?
En los vinos del Nuevo Mundo es admirable la consecución de calidades altísimas con un coste en ocasiones bastante inferior al nuestro. Considero que cuentan con una excelente gestión vitícola y de enorme profesionalización.
Si bien ofrecen conceptos distintos a los nuestros, quizá por nuestra forma de trabajar, pienso que los vinos españoles son más “personales” y están muy marcados por el carácter de la zona.
¿Cómo ves la D.O.Ca. Rioja en la actualidad?
Muy enfocada a vinos de calidad, a la diversificación, a la apuesta por el viñedo y por elaboraciones especiales tanto en vinos tintos como en rosados y blancos, consiguiendo así mejorar su imagen dentro y fuera de nuestro país.
¿Qué recuerdos tienes de tu primera copa de vino?
¡Eso es ir mucho tiempo atrás! Son recuerdos mágicos, rodeados de mi familia, quien tiene una pequeña cantidad de viñedo muy antiguo del que se elaboran vinos para consumo propio.
Por eso el vino siempre ha sido sinónimo de compartir momentos con seres queridos.
¿Cuál es el vino que más te ha sorprendido en los últimos años?
Un vino genérico de una pequeña bodega de Rioja Alavesa elaborado con tempranillo y gran porcentaje de graciano de viñedos antiguos y de muy poca producción, en el que la barrica es excepcional. También un Ribera del Duero de la zona más alta (Soria) elaborado con tempranillo con una potencia frutal y boca sedosa impresionante.
Elige un vino, un acompañante y el lugar donde degustarlo.
Es difícil elegir uno, lo importante es compartirlo y generar un ambiente donde realmente pueda disfrutarse ¿Y por qué no? ¡Que no sean pocos los acompañantes, que sean diversos los momentos, y que se abra más de una botella!