D.O. Toro

La Denominación de Origen Toro, arraigada en las provincias de Zamora y Valladolid desde su establecimiento en 1987, ha experimentado un notable crecimiento y reconocimiento en la escena vinícola española. Con unas 51 bodegas y alrededor de 1200 viticultores comprometidos con la excelencia, abarca una extensión de viñedo de aproximadamente 5.800 hectáreas. Esta región se distingue por su clima continental extremado con influencias atlánticas, que otorgan a sus vinos un carácter único y distintivo. En lo que respecta a las variedades blancas, se destacan la Malvasía castellana y la Verdejo, mientras que entre las tintas sobresalen la Tinta de Toro y la Garnacha Tinta, que desempeñan un papel fundamental en la identidad vinícola de la zona. Los vinos de la D.O. Toro han alcanzado fama y reconocimiento, especialmente gracias a sus monovarietales elaborados con la uva Tinta de Toro, que es la gran protagonista en esta región. Estos vinos se caracterizan por su intensidad, con una capa alta, una coloración profunda y una potencia aromática que destaca por sus notas de frutas rojas y negras. Su sabor aterciopelado y su carácter único, reflejo del terroir local, hacen que sean una experiencia sensorial inolvidable en cada copa. Además, sus grandes reservas tienen un gran potencial de guarda, lo que contribuye al crecimiento y la proyección futura de la zona. En cuanto a los porcentajes mínimos de volumen alcohólico, se establece un estándar del 10% para los blancos, un 11% para los rosados y un 12,5% para los tintos. La Denominación de Origen Toro, con su rica historia vitivinícola y su compromiso con la calidad, continúa deleitando a los amantes del vino con sus expresivos y distintivos vinos, marcando un camino de éxito y crecimiento en el panorama vinícola español.